Maharaji:
La necesidad de sentir

Qué hemos hecho con nuestra habilidad de pensar? Qué es lo que realmente hemos logrado con esta increíble herramienta de pensar?

Me recuerda a aquél día en que encontré una herramienta en mi escritorio, una clase de aparato. Había una nota que decía "Esto es un regalo para tí", pero esa persona no había dejado su nombre. En los días posteriores, traté de entender para qué servía esta cosa.

Nunca pude y todavía no puedo entender qué se supone que haga esta cosa. Es esta herramienta de pensamiento increíble semejante a ésa cosa? Algo que solamente yace en el escritorio y nosotros nos preguntamos "Qué puedo hacer con éso?

Qué hemos hecho con éste regalo del pensamiento? Una cosa que pensamos que podemos hacer es pensar acerca del futuro, pero realmente lo podemos hacer ó solamente podemos imaginar el futuro? El futuro es hipotético y cuando se convierte en realidad, no es lo mismo que nosotros pensamos que sería. Además, está el pasado, los recuerdos. Si miras una foto de alguien a quien has amado verdaderamente pero que ya no está alrededor tuyo, no le puedes decir "Te amo" y escuchar que te diga "Yo te amo, también". Se ha ido. Entonces, qué es lo que queda? Lo que queda es esta cosa única llamada realidad, y no está muy lejos, está en el momento llamado ahora, en el momento llamado presente. Y en éste momento llamado el presente hay algo que es tan diferente del pensamiento y éso es el sentimiento.

Puedes pensar acerca de la comida, pero es el sentir hambre que realmente te llevará a comer comida y satisfacer tu hambre. Es en éste momento llamado ahora que hay una sed verdadera, una sed que pone de manifiesto el deseo de estar pleno.

El Contentamiento no viene de los grandes monumentos que construímos el uno para el otro. Hay un monumento que un presidente de Francia lo llevó desde Egipto hace 150 años atrás, un monumento que originalmente fue construído por Ramses, el segundo, y tiene la siguiente inscripción:"Pueda este monumento para tí estar siempre ahí" y Yo lo digo en otras palabras " siempre y cuando los cielos duren. Pueda tu nombre ser perdurable siempre y cuando lo hagan los cielos."

Sin embargo, hoy día, cuántos de nosotros andamos por ahí en nuestra rutina diaria diciendo "Ramses, el segundo; Ramses, el segundo?" Lo que trato de decir, es que cuántas veces durante el curso del día el nombre "Ramses, el segundo" realmente nos llama la atención? Muy pocas. Sin embargo, en los años 3.000 antes de Cristo, en esos días, todos hablaban acerca de él. Era una civilización increíble y bastante avanzada.

Pero qué sucedió? El monumento está establecido en París con todos los autos franceses que circulan alrededor. En Egipto las personas están trabajando bajo el sol sofocante del desierto a todas horas tratando de restituir los monumentos increíbles que fueron construídos. Los cielos todavía están ahí? Sí. Las personas todavía quieren ir al cielo? Sí. La mayoría de las personas piensan más en el cielo que en Ramses, el segundo. El no está en la lista de prioridades de cosas en qué pensar en éstos días.

Como todo continúa, todo se desvanecerá. Y aún así, la aspiración de estar pleno siempre ha estado ahí. No importa qué generación, no importa qué civilización, no importa quién, cuándo, dónde, siempre ha habido una sed en los corazones de las personas que dice "Quiero sentirme pleno".

Hoy día, cuando todo evoluciona tan rápidamente, el pedido de estar pleno todavía está en funcionamiento? todavía está ocurriendo? el pedido de sentirnos plenos todavía existe dentro nuestro? La respuesta es sí. Y siempre lo será, porque está en el centro de nuestro ser.